El 18 de noviembre de 1803 se libró la Batalla de Vertières, el enfrentamiento decisivo en el que el ejército rebelde haitiano venció al expedicionario francés enviado por Napoleón para recuperar el control de la colonia, entonces llamada 'Saint-Domingue'. Fue la última gran batalla de la Revolución Haitiana, el punto final de una lucha feroz que llevó a Haití a convertirse en la primera república negra independiente.